Salir al bosque de noche enfortece mi vínculo con los ciclos de la naturaleza.  Hoy he salido a dar un paseo nocturno y a sentir como la Luna Nueva se aposentaba dentro de mí ofreciéndome sus dones.

La Luna Nueva y el Arquetipo de La Sabia toman forma en mi cuerpo.

Moverse con soltura en las profundidades de la noche oscura es algo que toda Mujer debe aprender a hacer. Aprender a sostener el miedo, a acallar la mente, a familiarizarse con el lenguaje de la profundidad, a reconocer los Sonidos…

Recuerda que la Tribu del Mundo de Abajo se mueve en esta profundidad nocturna.

arquetipo sabia

Cuando me adentro en la oscuridad del bosque siento que me estoy adentrando en mi propia oscuridad. Al principio mis ojos no ven con certeza…pero poco a poco éstos se van habituando a la noche. Mis ojos empiezan a ver entre las sombras vislumbrando un sendero por el cual caminar.

A la vez que mis sentidos se van agudizando.

Me siento en la tierra y me doy cuenta de que en oscuridad de la Luna Nueva no se escucha igual que durante del día. Aquí la escucha es mucho más sutil y requiere mucha más presencia. Cada respiración es una eternidad.

Al agudizar mi oído puedo sentir el canto de los búhos. Algo se estremece en mi interior al saber con total certeza que ese canto, tan suyo y tan peculiar, proviene de tierras lejanas. Muy lejanas.

Las diosas con búhos simbolizan la sabiduría de la muerte (que siempre dará lugar a la vida) y los misterios propios de las profundidades.

De forma paulatina los sonidos se van amplificando con el canto de otras aves, el de los grillos, el fluir del río y algún que otro animal terráqueo que me hace agudizar aún más mi presencia.

Los sonidos en un bosque cuando hay Luna Nueva son muy distintos a los de la Luna Llena. Los animales sintonizan con la Luna Negra y con sus misterios y yo me dejo llevar por ellos.

Feliz Luna Nueva,

Myriam